El alcalde de Chipiona, Luis Mario Aparcero, ha salido al paso de unas declaraciones realizadas por la portavoz socialista María Naval.
Aparcero no considera que la celebración de los plenos en horario de mañana sea una actitud antidemocrática y explica que la asistencia de público es aún mayor en ese horario. Además, explica que “supone un ahorro de más de 18.000 euros en gastos de personal, puesto que los trabajadores municipales no tienen que asistir fuera de su horario de trabajo”. Se trata, apunta el primer edil, de una medida con la que muchos partidos políticos están de acuerdo.
El Alcalde afirma que aplica el reglamento en cuanto a los tiempos de intervención de todos los portavoces por igual. “Las comisiones informativas previas al pleno se realizan para debatir los temas y para que la sesión plenaria no se extienda tanto, pero la oposición se abstiene para intervenir en el pleno”, ha señalado.
En relación al Tribunal de Cuentas, Luis Mario Aparcero ha desmentido que tenga que pagar 800.000 euros por las horas extra de la Policía Local. “Se trata de horas extra que han realizado entre 2021 y 2023, ya que, debido a la falta de plantilla, es imposible prestar los servicios durante el verano y los grandes eventos”, ha apuntado. En ese sentido, ha precisado que “solo hay unas diligencias previas en las que se ha informado lo que han recibido de horas extra que son 138.000 euros, que se solicita al Alcalde que lo abone y, por eso, he presentado un recurso”. Aparcero señalado así mismo que María Naval también tiene su responsabilidad, puesto que ha sido la Delegada de Personal y Hacienda. “Hemos abierto una caja de pandora que va a ser muy delicada en el futuro y quiero dejar claro que no estoy imputado ni hay malversación de fondos públicos”, ha afirmado. Aparcero también ha desmentido que se haya subido el sueldo para poder hacer frente a esos pagos.
El primer edil también se ha referido a los terrenos de Costa Ballena para explicar que en 2017 había una valoración de dichos terrenos de 20 millones de euros y que era inviable, sacándose a subasta y quedando desierta, lo mismo que ocurrió con los terrenos propiedad de la Junta, que hubo de bajar el precio. “Gracias a ello, hay tres grandes empresas que están construyendo más de 800 viviendas”, ha señalado.
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