Francisco Sánchez Mellado ofreció, como anunció a la radiotelevisión municipal, un pregón muy mariano con el protagonismo para María como centro de la vida de todo cristiano. Carmen, Esperanza, Piedad, Soledad, Dolores Rocío o Regla, María en suma, que siempre ha ido guiando sus pasos a lo largo de la vida, como mostró de un modo inmejorable la plegaria de su hermana Lola con Juan Gómez a la guitarra.
No faltó, no obstante un somero recorrido por la tradición de las cruces de mayo en le que Paco Sánchez se remontó décadas atrás destacando el valor de esa convivencia que se establecía entre vecinos. Y lo definió como un cúmulo de armonía, concordia, fraternidad, amistad y calma, casi nada.
El patio del Chusco, con su cruz plagada de flores, se llenó a mediodía del domingo para este pregón que tuvo como broche final sevillanas en la voz de Pepinto y, como no, el baile, que no puede faltar.
El acto fue organizado por la asociación de belenistas Caepionis con las Delegaciones de Cultura.
Sema Miranda aprovechó la ocasión para recordar la importancia de mantener tradiciones como la de las cruces de mayo y que, para ello, es imprescindible la implicación de los niños y los jóvenes.
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