La remera del Club Náutico Sevilla Camila Vargas, de origen salvadoreño pero formada a la sombra de la Giralda, hace balance de la que ha sido su segunda experiencia olímpica con la mente ya puesta en la próxima. En Londres, esta estudiante de Arquitectura de la Universidad de Sevilla superaba el 22º puesto de su estreno en unos Juegos, hace cuatro años en Pekín, para concluir decimosexta en la modalidad de skiff en las aguas de Eton Dorney. En la cita británica, como ella misma apunta una vez concluida la competición, cerraba un ciclo para despedirse de la boga individual.
Una vez pasados los Juegos, ¿qué sensaciones tiene? ¿Satisfecha?
Muy bien, la verdad es que estoy muy contenta con las regatas que he hecho. Quería quedar primera entre las representantes de Latinoamérica y al final fui segunda, pero comparando con el rendimiento de otras pruebas de este año, pude notar una mejoría.
Aún es joven y se ha superado. ¿Pensando en Río de Janeiro 2016 ya?
Es una idea tentadora, pero lo intentaría en algún bote de conjunto.
¿Con qué se queda de Londres 2012?
Fue una semana y media agotadora, con muchas regatas. Creo que ha sido la primera vez que me sentí agotada al terminar las regatas, pero a pesar de ello las disfruté. Estábamos en una subvilla y los únicos atletas que veíamos eran remeros o piragüistas. Lo bueno de ello es que estábamos impregnados en el mismo buen ambiente.
¿Le dio tiempo a hacer algo de turismo, de disfrutar de los Juegos en general, de otros deportes?
Viajaba sólo dos días después de la última regata, así que me ha dado tiempo de muy poco y no pude ver competiciones en directo que no fueran de remo. Lo poco que vi lo hice por la tele, ya que tenía que aprovechar el poco tiempo que tenía para estar con mi familia.
La experiencia habrá sido, una vez más, increíble. ¿Alguna diferencia con Pekín?
La madurez es lo que más se nota. También había más presión en Londres, pues tenía que quedar en una mejor posición, pero a pesar de todo lo disfruté más que nunca.
¿A partir de ahora, qué? ¿Regresa a Sevilla? ¿Seguirá compitiendo por el Club Náutico?
Terminaré mi carrera académica en Sevilla y sería una pena no remar si tengo el río en casa. Seguiré en el Club Náutico varios años, hasta que el cuerpo se queje.
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