Ante una numerosa audiencia, el ex- componente de Siniestro Total y Golpes Bajos fue repasando los temas más destacados de su trayectoria con ambos grupos, así como un par de temas ajenos. De este modo, y magníficamente acompañado por los músicos del grupo sevillano Maga (aunque sin su baterista habitual), fueron cayendo clásicos de Golpes Bajos como Hansel y Gretel (con una letra distinta a la original), Fiesta de los maniquíes, Necesito saber o No mires a los ojos de la gente (que tanto han interpretado Maga en sus directos). Los momentos más intensos y celebrados correspondieron quizá a la revisión de los temas que Coppini grabó con Siniestro Total hace ya 25 años (con un celebradísimo Ayatollah).
También hubo sitio para las colaboraciones, con la subida al escenario del inefable Antonio Luque (Sr. Chinarro) para cantar a medias un par de temas con Coppini, para un pequeño homenaje al siempre infavalorado Franco Battiato (Centro de gravedad), y por supuesto para el tema que grabó Coppini junto a Maga en el hasta ahora último disco de éstos, Trampa en la boca, el cual supuso el comienzo de la actual colaboración.
Maga, por su parte, se comportaron como una excelente banda de acompañamiento, con un grandísimo Miguel Rivera a la guitarra, dosificando en esta ocasión su prodigiosa voz para permitir el lucimiento de de un concentrado Coppini, quien pese a acusar el esfuerzo vocal exigido por algunos temas, a ratos aún consiguió poner los pelos de punta a más de uno con su voz y su peculiar estilo interpretativo.
En definitiva, un magnífico colofón para un ciclo que conseguido superar el nivel de las ediciones precedentes. Con sólo un pero, aunque ya en lo extramusical: Ha quedado patente que la única barra existente en el recinto resulta insuficiente para conciertos masivos como éste o como el de Piano Magic del pasado julio, al que asistieron 900 personas.
