
Ortega Cano no ha podido esconder sus emociones más íntimas. Tras siete meses de confesiones privadas y clasificación de recuerdo, ha presentado un documental sobre su vida. El torero ha recordado sus comienzos humildes, cuando vendía churros para ayudar a su familia, pero ha sido su historia de amor con Rocío Jurado la que le hace llegar a las lágrimas, y la llamo su princesa. Sólo una embestida ha podido herirlo de por vida. 'Fue una cornada impensable, que se la dio el toro a mi princesa, que tanto la quería'. Aunque es duro, mira de frente y sigue luchando, que es lo que ha hecho siempre. Es un maestro pero empezó en el mundo de los toros sin vestirse de luces. Hacía de toro para una parodia de cómicos de payasos.
Para ayudar a su familia, recién llegado a Madrid, vendió churros y uvas de la suerte. Pero confiesa que su gran suerte llegó con Rocío Jurado. 'Creo que sigo teniendo suerte, porque he conocido y vivido con ella 15 años maravillosos'. Lo suyo fue mitad admiración, mitad flechazo. Un día la vi mirando escaparates y paseando y estuve siguiéndola toda la tarde.
Ahora, el torero hace memoria en este documental. Ha costado siete meses confesar y poner en orden tantos recuerdos. Habla de Rocío, de sus hijos, sus pasiones, y de sus sueño. 'Para mí el mayor placer sería que Rocío volviera'.
Dio las gracias a Isabel Pantoja por lo cariñosa que estuvo en el funeral de Rocio ., porque en el fondo se querian. Ortega Cano tambien recibio el premio Mayte por su faceta literaria como comentarista de toros .

